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Viajar por el Eurotúnel bajo el Canal de la Mancha rumbo a Gran Bretaña es toda una experiencia y desde luego recomendamos vivirla al menos una vez en la vida. Situado entre Coquelles (cerca de Calais) y Folkestone no es la forma más barata para llegar a Inglaterra, pero mola muchísimo.

El "Eurotúnel" que une Francia con Inglaterra por debajo del Canal de la Mancha es una obra de ingeniería colosal. Tiene unos 50 kilómetros de longitud total -39 de ellos bajo el mar- y en realidad son tres los túneles construidos. Dos de ellos para la ida y la vuelta tanto del tren "Eurostar", que une Londres con París, como de los trenes-lanzadera que transportan vehículos desde Coquelles a Folkestone. El tercer túnel, el central, está destinado para tareas de mantenimiento y auxilio en caso de emergencia. 

Evidentemente, la alternativa al Eurotúnel es el barco surcando el Canal de la Mancha. La elección de uno u otro medio es una decisión particular, tanto por gustos como por las ofertas que podamos conseguir en un momento determinado, porque cruzar el charco es todo menos barato. 

Viajar en barco siempre supone un cierto riesgo de encontrarnos un mar enfadado -mayor en algunas épocas del año- que convierta la travesía de 90 minutos en una verdadera pesadilla. Hemos cruzado el Canal una decena de veces, siempre en verano, y solamente una vez hemos pillado realmente mala mar, pero no fue precisamente agradable...

Otra cuestión a tener en cuenta antes de tomar una decisión es que, en el Eurotúnel, contratar la posibilidad de anular la reserva supone un sobrecoste exagerado. Eso significa que, la mayoría de las veces, habrá que asumir el riesgo si queremos abaratar el coste. Por el contrario, esa posibilidad es mucho más asequible en el ferri. Por ese motivo, desde 2013 no hemos vuelto a utilizar el Eurotúnel y las siguientes cuatro visitas a Gran Bretaña las hemos hecho siempre en ferri.

ATENCIÓN AUTOCARAVANISTAS. Lo dicho anteriormente cambia un poco si en vez de caravana o remolque se viaja en autocaravana. En ese caso las tarifas son bastante más asequibles y, entonces, la diferencia de coste respecto al ferri ya no sea tan grande. ¡Toca comparar precios!


De lo que no cabe duda es que es una forma mucho más rápida que el ferris de pisar suelo británico. Y es fácil. Una vez pasado el check-in y el estricto control aduanero, hay que colocarse en la fila del carril que nos asignen (lane). Coches por un lado, camiones por otro, otro de caravanas y autocaravanas, etc. Una vez iniciado el proceso de embarque, los vehículos van entrando en el tren en rigurosa fila india.

Cómo llegar al Eurotúnel

El acceso al Eurotúnel, desde Francia, se hace por la autopista A16. De regreso, por la A20 británica a Folkestone. Si todavía no habéis echado un vistazo a cómo llegar a Calais desde la frontera de Irún ahorrando en peajes, pinchando en el cuadro tendréis todo el recorrido explicado con detalle...

Ahí también encontraréis las recomendaciones para llenar el depósito de combustible antes de pasar a Gran Bretaña.


¡Y llegamos al Eurotúnel!

El acceso o "check-in" a las instalaciones del Eurotúnel se hace a través de unas garitas similares a las de un peaje de autopista. Si nuestro billete es de tipo "Flexipass", hemos de seguir la señalización.

¿Viajamos con una mascota?

Si nuestra mascota viaja con nosotros a Inglaterra (perros, gastos y hurones) antes de pasar por la garita de "check-in" deberemos tomar el desvío al edificio de control de mascotas "Pet Reception" que hay en la rotonda para pasar el preceptivo control veterinario. En el siguiente enlace encontraremos toda la información necesaria para no tener problemas. Es importante recordar que hay que llevar toda la documentación en regla desde España, especialmente en lo tocante a las fechas de vacunación de la rabia y, muy especialmente, de la desparasitación contra la equinococosis, firmada por el veterinario con fecha y hora del tratamiento, para el cruce entre las 24 y 120 horas tras la desparasitación. Se recomienda pasar el control veterinario, al menos, una hora y cuarto antes de la hora de salida. https://eurotunnel.es/mascotas/.

En el Tren Lanzadera

Una vez hecho el "check-in" y tras pasar el control de pasaportes, podremos dirigirnos directamente a la zona de embarque en los trenes lanzadera o, si llegamos con antelación, podemos dar una vuelta por el centro comercial adyacente. ¡OJO, si llegamos antes de la hora de salida prevista, es bastante probable que nos permitan viajar en uno de los trenes que salgan antes siempre y cuando haya plazas y la tarifa sea la misma.



El proceso de embarque en el tren lanzadera se hace con bastante agilidad. Realmente no es más que una larguísima sucesión de vagones que, en el momento de la partida, se compartimentan automáticamente de una forma impresionantemente “galáctica”, cerrándose con puertas hidráulicas. Vamos, nada que envidiar a los artilugios futuristas de las pelis de James Bond.

Eso sí, que nadie espere ver sirenas y pececitos nadando a través de las ventanas. El trayecto transcurre íntegramente por el interior de un túnel. Sin ventanas, rótulos publicitarios en las paredes hacen las veces. Y tampoco hay asientos. Los del coche de cada uno son los únicos “asientos” disponibles. Hay una “acera” en cada lado y, por supuesto, es posible pasear de un vagón a otro.

¡Y llegamos a Inglaterra!

Exactamente 35 minutos después de arrancar, se abre una puerta lateral del tren y se accede directamente a la autopista británica. ¡Llegó el momento de recordar que allí se circula por la izquierda!



¿Circular por la izquierda es complicado?
No, no lo es. Es mucho más sencillo de lo que parece. A los pocos minutos nos habremos habituado. Simplemente hay que tener en cuenta ciertos detalles: en las numerosas rotondas, hemos de fijarnos que los coches llegan por la derecha y que, al incorporarnos a ella, nos hemos de colocar en la vía izquierda. Luego, llevar bien regulado el retrovisor derecho porque deberemos fijarnos bien si nos están adelantando o, si queremos adelantar nosotros, comprobar que no estorbamos a ningún otro vehículo. Por último, hay que acostumbrarse a que en las incorporaciones de autopista los coches llegan desde la izquierda. En fin, que es más complicado explicarlo que conducir por allí. ¡Temores fuera!

Una cuestión a tener en cuenta son los múltiples radares que nos iremos encontrando, que en las autopistas es frecuente que los límites de velocidad vayan variando (son señales luminosas, especialmente abundantes en la M25, que es la autopista de circunvalación de Londres) y, sobre todo, que tanto las señales de velocidad como las distancias son en millas y yardas. Como una milla mide 1.609 m. el límite de velocidad en las autopistas, para nosotros, será de 112 km. (80 millas). Toca habituarse.

El asunto de la primera noche en UK

ATENCIÓN: La hora de cruzar a Gran Bretaña tiene su aquel respecto a donde pernoctar la primera noche en suelo inglés. Si tenemos previsto llegar a UK por la tarde o la noche hemos de ser conscientes de dónde vamos a dormir. Si la idea es hacerlo en un camping tendremos que asegurarnos que vamos a poder registrarnos antes del cierre de la recepción. No obstante, hay campings cerca de la zona de Dover y Folkestone que tienen habilitadas zonas de aparcamiento fuera del camping, incluso con toma de luz y que se denominan "Late arrivals", es decir, "llegadas tardías".

Si por el contrario pensamos pasar la noche en una área de servicio, hemos de saber que solamente se autorizan paradas de hasta dos horas. Si la idea es estar más tiempo, entonces hay que pagar la estancia y hacerlo ya no es que cueste dinero, es que no siempre es fácil cómo pagarla. Recomendamos, en tal caso, informarse bien previamente al viaje.

Por último, si la idea es utilizar alguno de los "Park & Ride" que abundan en las ciudades británicas (el de Canterbury, por ejemplo), también conviene informarse previamente de los horarios de acceso, para evitar sorpresas. Las autocaravanas es menos probable que tengan problemas de acceso a esos aparcamientos, pero en la inmensa mayoría de los Park&Ride no suelen aceptar caravanas. Tened también en cuenta que en UK hay una hora menos...

Es decir, conviene que coordinemos el momento de la travesía del Canal en función de donde pasar la primera noche. Por ejemplo, en verano de 2024, cruzamos en ferri a las 2,30 de la madrugada e hicimos, de noche, el trayecto a Cambridge, nuestra primera parada. Paramos a descansar un par de horas por el camino y a las nueve de la mañana entramos en el camping "Highfield Farm Touring Park", cercano a la ciudad universitaria. Sin embargo, otras veces hemos hecho noche en Calais y hemos cruzado por la mañana. En fin, cada cual ha de organizarse en función de su plan de viaje.